Antes de trasladarse a la barriada de La Princesa, el Club 60 nació en 1989 en el desaparecido callejón del Picador, junto a calle Beatas, donde apenas estuvo un año que dio para mucho: Rafa Rodríguez (Agentes Secretos) y Eugenio Pastrana (Seis Siglas, Los Cubiertos) establecieron el punto de encuentro mod por excelencia. Allí rendían tributo a la música de los sesenta, como su nombre indica: soul, rock and roll, power pop; los Beatles, la Creedence, los Rolling Stones… pero lo que más le diferenciaba de otros lugares es que se pinchaba música nacional (Los Brincos, Los Bravos, Los Sirex, Palito Ortega, Marisol…).
Además de promover activamente la cultura, el Club 60 era un centro de difusión de la música malagueña: muchos grupos se reunían allí, estrenaban sus maquetas y solían dejar unas cuantas copias para venderlas.
